En nuestro país existe cierta legislación que establece que el cerrajero no puede abrir la puerta de acceso a una vivienda así como así. No sin antes asegurarse de que la persona que ha solicitado sus servicios es el legítimo propietario o arrendatario del inmueble. La propia Constitución Española, establece en su artículo 18.2 el principio de inviolabilidad del domicilio, por lo que no se podrá entrar ni registrar una vivienda sin el consentimiento del titular de la misma o, en su defecto, una resolución judicial. Como cerrajeros en Santa Cruz de Tenerife te contamos que la única excepción a esta norma la constituye un caso de delito en el interior del inmueble.
En cuanto a la resolución judicial será responsabilidad del juez proveer al agente de la autoridad para que pueda acceder al interior de la vivienda. En cualquier caso, cuando existe una resolución judicial favorable a la apertura de un inmueble, será necesario portar una orden específica que autoriza la entrada a la vivienda. Para acceder al domicilio sin dicha autorización debe haber indicios de que en su interior se está cometiendo un delito flagrante. Es decir, que el delito sea evidente y que la intervención urgente de las fuerzas de seguridad para detener esa situación sea necesaria.
Desde Cerrajería JMD queremos profundizar en el concepto de titular de una vivienda. Cuando un usuario determinado solicita los servicios de algún cerrajero en Santa Cruz de Tenerife este deberá asegurarse de que esa persona es el titular de ese inmueble. Sin embargo, en muchas ocasiones, el usuario no podrá demostrar que es el titular ya que han olvidado su documentación en el interior del inmueble. Cuando se produce esta situación puede solicitarse la presencia del presidente de la comunidad o los vecinos de la finca para la apertura de la vivienda. En ausencia de los mismos podrá reclamarse la presencia de un agente de la autoridad, que tras la apertura de la puerta solicitará al usuario que muestre los documentos que acreditan que es el titular del inmueble. En caso contrario, la persona que solicita el servicio de cerrajería será denunciada y habrá que restablecer la cerradura a su estado inicial.